Practicando la Religión Científicamente
Primer templo de Self-Realization Fellowship,
Encinitas, California, 18 de Febrero de 1940
Muchas veces se dice que hay un gran conflicto entre ciencia y religión. Es cierto que los científicos ven con escepticismo la afirmación de que ‘el cielo y la tierra’ fueron creados en cuestión de días. A partir de sus estudios prácticos sobre la Tierra, han probado que la creación avanzó a través de un lento proceso evolutivo; y la progresión de la Tierra, de los gases a la materia, las plantas, la vida animal y el hombre requirió millones de años. Así que hay muchas diferencias entre los hallazgos de los científicos y la interpretación literal de las escrituras.
Una de las virtudes del verdadero científico es que es muy abierto. Trabajando a partir de unos pocos datos, experimenta hasta que descubre principios naturales fiables y cómo actúan; después él da al mundo el resultado de sus investigaciones. Y está dispuesto a considerar y a investigar cualquier nueva evidencia que salga a la luz. Son los esfuerzos de tales científicos los que han resultado en el descubrimiento de todas las leyes naturales que han sido aprovechadas para el beneficio del mundo. Gradualmente estamos aprendiendo a usar estas leyes en un cada vez mayor abanico de posibilidades; como, por ejemplo, para las numerosas comodidades de nuestros hogares.
Los Científicos Trabajan En Cooperación Con Dios
Los científicos son a veces catalogados como materialistas por su afán de cuestionar las creencias religiosas no-comprobables. Pero Dios no les condena por eso. Sus leyes universales actúan con justicia imparcial, sin importar las creencias del hombre. En este sentido, Dios no respeta a las personas, sino a las leyes. Nos ha dado una libre voluntad y, le adoremos o no, si respetamos Sus leyes, recibiremos los resultados beneficiosos de tal respeto. Un científico escéptico puede explicar su posición de esta forma: “Aunque no crea en Dios, intento hacer lo que es correcto. Si hay un Dios, El me recompensará o me castigará de acuerdo con mi respeto por Sus leyes. Y si no hay Dios, como estoy obedeciendo las leyes que creo verdaderas, seguramente recibiré un beneficio de alguna parte.”
De esta forma, crean o no que existe un Dios, estos científicos cuyos descubrimientos nos muestran más y más leyes de Dios están trabajando en cooperación con El en beneficio de la humanidad.
Creer Es Solo el Primer Paso
La ley gobierna todo en el universo; y aún hay mucha gente que no ha intentado aplicar la ley científica de la experimentación para examinar doctrinas religiosas. Ellos simplemente creen, pensando que es imposible investigar y probar las sagradas escrituras. ‘Tan solo debemos creer,’ se dicen a sí mismos y a los demás; y eso debe de aceptarse. Pero la Biblia nos dice que ‘La fe es la substancia de las cosas deseadas, la evidencia de aquello que no se ve.’* La fe es diferente de la creencia, que es solo el primer paso. Si os dijera que detrás de este edificio hay un enorme león, probablemente diríais, ‘No creemos que sea posible’ Pero si yo insistiera, ‘Sí, hay un león ahí,’ me creeríais e investigaríais para ver si es cierto. La creencia fue necesaria para haceros mirar. De forma similar, si quisiera persuadiros de realizar un experimento espiritual, primero debes creerme antes de llevarlo a cabo. Puedes creer, por lo menos, hasta que demuestres lo contrario.
La fe, no obstante, no puede ser contradecida: es una convicción intuitiva y no puede ser sacudida ni por una evidencia contraria. La fe puede curar a los enfermos, resucitar a los muertos, crear nuevos universos. Jesús dijo, ‘Si tuvierais una fe del tamaño de un granito de mostaza, diríais a este monte: trasládate de aquí allá, y se trasladaría; y nada os sería imposible.’ (Mateo, 17:20).
La ciencia es razonable, siempre dispuesta a alterar sus principios bajo los nuevos descubrimientos. Es escéptica respecto a la religión solo porque no ha experimentado en ese campo; aunque ahora está empezando esta investigación en Harvard.
La psicología experimental ha avanzado mucho y está haciendo un gran esfuerzo para comprender al hombre por dentro. Se han inventado máquinas que pueden almacenar diferentes experiencias y emociones humanas; dicen que si uno miente mientras le están haciendo una prueba con un polígrafo no puede ocultar el hecho, no importa lo mucho que lo intente.
La Auto-Realización Es Necesaria Para Experimentar a Dios
El conocimiento científico se sustenta en los hechos. La parte médica está bastante bien desarrollada, aunque las causas y las curaciones de ciertas enfermedades aún están por descubrir. Pero lo que la ciencia sabe es más o menos seguro, ya que los factores implicados han sido comprobados: las teorías han sido estudiadas y probadas. En la religión es diferente. Se le da a la gente ciertos hechos y afirmaciones y se les dice que deben creerlo. Después de algún tiempo, cuando su creencia no puede satisfacerse, la duda hace su aparición; y aquella persona va de religión en religión intentando hallar pruebas. Oyes hablar de Dios en las iglesias y los templos; puedes leer sobre El en los libros; pero tan solo puedes experimentar a Dios a través de la auto-realización, la cual se obtiene mediante la práctica de determinadas técnicas científicas. En la India, la religión se basa en tales métodos científicos. La realización es en lo que la India se ha especializado, y aquellos que deseen conocer a Dios deben conocer sus métodos; no son propiedad única de la India. Así como la electricidad fue descubierta en occidente y nosotros en la India sacamos provecho de ella; la India ha descubierto los caminos mediante los cuales Dios puede ser alcanzado, y el mundo occidental debería sacar provecho de ello. Mediante la experimentación, la India ha probado las verdades de la religión. En el futuro, la religión será una cuestión de experimentación; no se basará solamente en la creencia.
Millones de personas cambian de una iglesia a otra sin creer realmente lo que han oído sobre Dios. Dicen, ‘Bueno, yo hago plegarias, pero la mayoría de las veces El no me responde.’ Sin embargo, Dios siempre nos vigila. Lo sabe todo de nosotros, aunque nosotros lo ignoremos todo sobre El. Esta es la causa de las dudas que acechan nuestra mente. Si Dios existe, debemos ser capaces de conocerle. ¿Por qué podemos tan solo oír hablar de El y no saber nada a partir de la experiencia personal?
Pero hay un camino definitivo para experimentar a Dios. Es la experimentación científica de las verdades religiosas. Es posible llevar la religión a la práctica, usarla como una ciencia que puedes probar mediante la experimentación sobre ti mismo. La búsqueda de la verdad es la más maravillosa búsqueda del mundo. En vez de ser meramente el hecho de atender al sermón del domingo, o de realizar el puja,* la religión debería tener un lado práctico. Aprende a construir tu vida alrededor de los ideales espirituales. Sin aplicación práctica, la religión tiene muy poco valor.
Un hombre que tenía un rancho cerca de aquí era bastante materialista. Le dije que viniera a Encinitas de vez en cuando, y así lo hizo. Después de las primeras visitas, me dijo, con lágrimas en los ojos, ‘Nunca pensé que hubiera un lugar cuya atmósfera pudiese hablar tanto de la presencia de Dios.’ La religión debe ser práctica. Debe cambiar algo en ti – en tu conciencia, y en tu comportamiento. Todos los que han venido regularmente han cambiado su estilo de vida para mejor. Han sido espiritualmente influenciados por este ambiente.
Así pues, se debe experimentar con la religión, probarla y hacerla práctica. Muchas iglesias hacen un bien social, pero no te enseñan como experimentar a Dios, ni como puedes conectar con El.
El Primer Experimento Es el Silencio
El primer experimento con la religión debe comenzar con el silencio. Mucha gente nunca se toma algún tiempo para estar callado o para sentarse a meditar. Durante horas y horas, yo permanezco en silencio interior. Cuando estoy con gente me entrego a ellos por completo y de corazón. Pero cuando estoy lejos de las personas, me encuentro totalmente solo en esa alegría suprema – la alegría de Dios. No importa donde esté, esa alegría de Dios está siempre conmigo. ¿Por qué no experimentas con el silencio, para así poder vivir de esta manera? Muchos de vosotros no podéis estar quietos durante diez minutos sin que vuestros pensamientos empiecen a dispersarse en todas direcciones.
No habéis aprendido a estar en paz interiormente, porque estáis continuamente dando vueltas a vuestra mente. Mi maestro, Sri Yukteswar, solía decir: ‘Cuando cierra la puerta del almacén de la felicidad, el hombre corre hacia cualquier sitio, buscando felicidad. Qué tontería, cuando tiene toda la felicidad almacenada en su interior.’ Desde mi niñez he buscado a Dios y la comunión con El me ha proporcionado una felicidad que ningún deseo material alcanzado me podría dar. Si no tienes a Dios no tienes nada. Lo tienes todo si tienes a Dios; porque El es el amo del universo.
Si no has conseguido ningún resultado a través de la religión, experimenta con la meditación. Saca a Dios de su silencio. Debes insistir: ‘Dios, ¡Háblame!’ Si haces un esfuerzo supremo en el silencio de la noche y por la mañana, al cabo de poco tiempo verás el parpadeo de la luz de Dios o sentirás una onda de Su alegría sobre tu conciencia. Experimentar para conocer a Dios durante la meditación, en silencio, proporciona los resultados más reales, los más notables. Los científicos creyeron una vez que el agua era un único elemento. Pero experimentos posteriores demostraron que estaba formada por oxígeno e hidrógeno. De forma similar, mediante experimentos religiosos, maravillosas verdades espirituales pueden conocerse. Cuando te sientes a meditar, y tu mente esté recogida en su interior, tendrás una prueba de la existencia de Dios y de tu propia naturaleza. La experimentación con las leyes religiosas es maravillosa porque el resultado no tiene lugar fuera de ti; está en tu interior.